Una solución moderna y funcional para cocinar con comodidad, pero que requiere espacios y sistemas ad hoc: el consejo para entender si la cocina con isla es realmente para ti.
En los hogares modernos, donde la cocineta a menudo se fusiona con la sala de estar, la cocina con isla se ha convertido en una solución de moda, muy querida no solo por quienes pasan horas en la cocina, sino también por quienes aprecian la personalidad con la que llena el ambiente, el espacio y la elegancia que transmite a todo el entorno.
Desde hace unos años la cocina se ha ido labrando un papel cada vez más central en nuestros hogares: de un ‘taller’ de cocina escondido se ha convertido en el lugar de compartir por excelencia, gracias también al boom del espectáculo de cocina y una nueva cultura ligada a la comida.
Optar por renovar la cocina con una cocina con isla significa rediseñar la zona de estar dándole una impronta moderna y social, pero puede que no siempre sea la mejor solución. Para entender si la cocina de la isla es adecuada para nuestros espacios y la forma en que nos movemos alrededor de la estufa, es necesario evaluar cuidadosamente los pros y los contras.
# 1 Hermoso, cómodo y social
El mostrador central de la cocina con isla hace que todo el ambiente sea más moderno y acorde con los tiempos. Pero es sobre todo desde el punto de vista funcional, es decir, de la cocina, que revela todas sus ventajas.
La isla es el centro alrededor del cual gira todo el entorno: permite un uso más cómodo e intensivo de la encimera y hacer malabarismos libremente entre las estufas y las tablas de cortar sin renunciar a la compañía de los invitados, con los que podemos compartir todas las fases de la creación de nuestros mejores platos.
# 2 Mucho espacio extra
La cocina con isla ofrece mucho espacio extra, desde la parte superior para cocinar, lavar y cocinar, hasta las puertas para guardar platos, ollas y diversos accesorios. El espacio debajo de la encimera, en particular, puede incorporar un horno y lavavajillas, que así quedan “ocultos” a la vista desde la sala de estar. Una bonita ventaja que además te permite amueblar el resto de la cocina con mayor libertad, sin tener que lidiar con el tamaño de estos dos electrodomésticos.
# 3 Más profundidad
La cocina con isla ofrece una mayor profundidad que una encimera normal. Cuanto mayor sea la profundidad, más funcional será la superficie de la isla, ya equipada para aprovechar al máximo cada centímetro disponible. Una cocina con isla de 70 a 100 cm de profundidad puede alojar cómodamente una placa de inducción y un fregadero grande, sin renunciar al espacio necesario para cocinar cómodamente.
# 4 Conviértete en un plan de refrigerios
La encimera de cocina con isla se puede ampliar y transformar en encimera de aperitivo; equipado con cómodos sillones y taburetes de diseño, es perfecto para desayunos y comidas rápidas.
# 5 Fácil de limpiar
Un último aspecto que no se debe subestimar: a la hora de cocinar y freír es inevitable manchar la pared cercana a la estufa con salpicaduras de aceite y rebozado, para esto antes de todo recuerda utilizar una membrana para impermeabilizar y hacer que todo este protegido.
Con una cocina con isla, colocada en el centro de la habitación y alejada de las paredes, solo la parte superior se ensucia, mucho más fácil de limpiar y mantener en orden.
